Bolivia, un futuro sin agua
Desde hace dos años, y con mayor dramatismo durante los últimos meses, distintos organismos internacionales publicaron informes sobre los efectos del cambio climático a nivel mundial. Las Naciones Unidas, el Banco Mundial, organizaciones ecologistas y paneles de científicos se convirtieron en los voceros de lo que le espera al planeta en el corto y mediano plazo.
En las últimas semanas nos llamó la atención la actualización de algunos de esos informes que, con nuevos análisis y datos corregidos, arrojaron conclusiones aún más negativas, casi apocalípticas. Derretimiento de glaciares, aumento de la temperatura, sequías, inundaciones masivas, falta de agua en grandes ciudades, aumento de los niveles de los mares. Uno de los datos más estremecedores es que estos pronósticos se harán realidad en pocos años.
En las últimas semanas nos llamó la atención la actualización de algunos de esos informes que, con nuevos análisis y datos corregidos, arrojaron conclusiones aún más negativas, casi apocalípticas. Derretimiento de glaciares, aumento de la temperatura, sequías, inundaciones masivas, falta de agua en grandes ciudades, aumento de los niveles de los mares. Uno de los datos más estremecedores es que estos pronósticos se harán realidad en pocos años.