Plan Mi Agua busca extender tierra productiva
“Tenemos prevista una recuperación de 30 mil hectáreas productivas en todo el país. Hace cinco años, el incremento de superficie bajo riego en el país no pasaba las dos mil hectáreas por año”, aseguró.
La autoridad destacó la importancia del desafío que le permite a la población rural duplicar sus ingresos por su actividad, ya que los objetivos permitirán “tener actividad agrícola durante todo el año”.
Dentro del programa Mi Agua, se tiene proyectada una inversión de cien millones de dólares con destino a obras de microrriego en el país, donde cada municipio recibirá 300 mil dólares para esos proyectos.
En la política de fortalecimiento de la actividad agrícola y productiva, Caro explicó que se tienen convenios con la Corporación Andina de Fomento (CAF). “Se trata de programas más grandes, con un soporte de 125 millones de dólares, destinados a riego en mediana escala, saneamiento básico y agua para pequeñas poblaciones”, añadió.
La Ministra consideró que el saneamiento básico es imprescindible para lograr otras metas de impacto social y desarrollo en el país.
Recordó que el recurso agua potable es vital para proyectos contra la desnutrición, mejoramiento de salud y elevar los niveles de educación.
“Si no hay agua potable es difícil que las medidas (de impacto social) e incluso los alimentos complementarios que distribuimos puedan ser consumidos en las condiciones adecuadas. Estamos haciendo una inversión nuevamente de 150 millones de dólares, 125 provienen del crédito y nosotros estamos poniendo 25 millones de dólares. Todo estará destinado principalmente a lo que son obras de mediano riego, saneamiento básico y agua potable”, afirmó.
Además del programa Mi Agua y la cooperación de la CAF para microrriego, el Ministerio de Medio Ambiente y Aguas ejecuta otros proyectos con recursos provenientes de la cooperación española y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por un monto de 100 millones de dólares. “Este proyecto permite llegar con obras de mayor escala a poblaciones intermedias y áreas urbanas”, especificó.
La autoridad destacó la política decidida del Gobierno a través del Proyecto Integrado de Seguridad Alimentaria (PISA) y la creación del Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (Iniaf), instancias responsables de todo lo que es investigación y extensión agropecuaria. De ese modo, dijo, el Estado tiene la responsabilidad de investigar y extender el conocimiento a los sectores productivos sin exclusiones.
El Estado asume sus competencias
Con la implementación del Proyecto Integrado de Seguridad Alimentaria (PISA) y de la creación del Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (Iniaf), el Estado asume sus competencias, aseguró ayer la ministra de Planificación del Desarrollo, Viviana Caro.
Destacó que con la incursión decidida en las áreas de la investigación y la extensión de los conocimientos agropecuarios, el país adquiere la responsabilidad de la certificación de los productos para consumo interno y de exportación.
Con el Iniaf, el Estado recuperó los bancos de germoplasma, que antes estaban bajo administración de privados, para resguardar las reservas genéticas. “Ésa es una tarea fundamental”, sostuvo.
Tomado del periódico Cambio
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